El dia de la Madre

El dia de la madre
también me está doliendo,
sera porque su dolor me sigue sucediendo.
Porque si bien soy padre
corazón de madre tengo.

Me sucede el dolor
de las creencias inamovibles
que fueron infladas cual dirigibles
por los discípulos del autor
que sin duda era un ser sensible.

Me suceden las lágrimas
por el dolor de una enfermedad
debida a la terquedad
de no poder perdonar
carencias de toda la humanidad.

Me sucede la zozobra
del temor constante a la vida
por ser arriesgada y atrevida
y no ceñirse a la obra
que teníamos preconcebida.

Me sucede el sufrimiento
Por el dolor de los más allegados
que muchas veces por tarados
se procuran sin miramientos
aunque se les haya avisado.

Me sucede el vacío
Del nido que quedo sin la prole
por más que hayamos sido promotores
del éxodo temprano o tardío
sigue siendo el mas grande de los dolores.

Me suceden tambien alegrías

La de los nietos que llevamos en brazos
aunque nos dejen peor que los embarazos
porque basta con que se rían
para apretarlos contra el regazo.

La de un amor maduro
Que por estar desprovisto de razón
y de sentimiento de claroscuro
Llena todo el corazón
y ablanda lo que era duro.

La de una niñez tardía
pues si por mi madre y mujer tanto padecía
no ha de ser por ser viejo
sino más bien por ser pendejo
que no ha madurado todavía.

¡En buena hora alma mía!
Si madurar es dejar de sentir
Si madurar es simular no sufrir
Prefiero seguir en mi porfía
de inmaduramente vivir.
Y por las madres llorar
en este dia que las recuerda
aunque sea puramente comercial
y no hagan marketing para las que están muertas.